Ananda, el yogui errante


Ramiro Calle
Fotografía: La Vanguardia

Hay personas que no se adaptan a lo que les rodea. Ya sean ricos o pobres, tienen dudas y anhelos constantes relacionados con su existencia. La angustia, el sufrimiento y la ansiedad son sentimientos que siempre, de una forma u otra, nos acompañan, pero se pueden gestionar. 

Como en la actualidad todo debe hacerse lo más rápido posible, pretenden solucionar el problema bloqueando artificialmente un impulso que no es sino la respuesta natural ante el despropósito de esta sociedad. Pero la solución, aunque el camino sea largo y difícil, se encuentra en la búsqueda de la verdad, evitando la mentira, amando intensamente a todas las criaturas del mundo, buscando consuelo en la sabiduría, esforzándose en la conquista de uno mismo y, en definitiva, eliminando la agitación, combatiendo la inercia y estableciéndose en la luz. 

De quien se puede aprender mucho es de Ramiro Calle, el más importante escritor orientalista de este país. Ha viajado a la India más de noventa veces, ha entrevistado a los más relevantes maestros de la meditación, y ya cumplidos los 76 años, sigue dirigiendo su propio centro de yoga en la capital. 

De entre todos los libros que Ramiro ha escrito, que son muchos, hoy os recomiendo Ananda, el yogui errante

Cuenta la vida de su protagonista, Devendrenath Das, desde que es niño a la edad adulta. Nacido en una familia acomodada de India, se debate entre la vida material de éxito y la llamada del espíritu. Pero, ¿qué tipo de vida finalmente triunfará: la material o la espiritual?

Bueno, viniendo de Ramiro Calle, la respuesta es más que indudable. Lo interesante de la obra está en el camino, en todo aquello que siente y padece el protagonista hasta llegar a un estado consciente vinculado a la verdad. Acompañando al personaje principal, el autor responde a las preguntas que todos nos formulamos, y se sirve de otros personajes para confirmar lo que pensamos.

El hombre descubrió la rueda, canalizó las aguas, levantó grandes edificaciones. Bien, es cierto. Pero ¿ha hecho algo por su mundo interior, por su vida espiritual? ¿Ha hecho realmente algo que le saque de su embriaguez interior? Mirad, en todos nosotros hay algo de verdadero y mucho de falso: El hombre de ahora continúa despreocupándose de lo verdadero alimentando lo falso, seguramente como el hombre que caminaba a cuatro patas. ¿Cuál os da más pena, aquél o el de ahora, que ha aprendido tantas cosas e incluso terminará viajando a otros planetas o hasta descubriendo la forma de vivir trescientos o cuatrocientos años?

A mí el de ahora me da mucha pena. Y por mucho que lo intente, no lo entiendo. Y no es que haya viajado poco. En lugares que se consideran subdesarrollados, por mucho que busque, no encuentro a nadie que tenga tan serios problemas. Y con serios problemas, por si a alguien le da por llevarse las manos a la cabeza, me refiero a lo verdadero. ¿A qué estamos llamando desarrollo?

Ramiro Calle nos enseña cómo, a través de la meditación, podemos servirnos de los sentimientos tóxicos para convertirlos en aliados, siendo creativos y productivos, controlando el pensamiento hasta centrarnos en el aquí y el ahora. El autor, sin ser nada pretencioso ni extremista, nos muestra el camino y nos invita a recorrerlo, seamos economistas, abogados, publicistas o lo que seamos. 

La historia que relata a través de Devendrenath es muy parecida a la de Siddharta Gautama, Buda para los amigos. No obstante, quizás Devendrenath sea mucho más cercano a nosotros y no llegue tan lejos, pero aprende lo suficiente para poder encontrarse a sí mismo.

Roser Ribas, 2019.

Comentarios

Entradas populares